viernes, 3 de septiembre de 2010

Niebla

Todo tiembla, las manos, la casa. Las miradas tiritan como luces de navidad, intermitentes, dispersas. El se sienta lejos esta vez y tu sientes las corrientes de electricidad cruzar la habitacion sin anidar en el. El aire se llena de yo-mi-me conmigos y tu temes los silencios, porque sabes que las unicas verdades que jamas habeis intercambiado se quedaban quietas en los silencios, en las palabras no dichas.

Y las manos que no te tocan, la respiracion que no tantea tu nuca, las bocas que no se encuentran te apunhalan despacio. Cogeras las cosas y te iras, emigrando a tierras donde la soledad es inevitable, no escogida, donde prudencia y cobardia no se confunden en los limtes de la gramatica y el autoenganho. Pero todavia no. De momento llenas de humo la oscuridad compartida y mientes. Al no decir nada mientes, y la mentira os cubre a los dos como niebla. Niebla inglesa.

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